“Los seres humanos no vivimos la realidad, la pensamos”
Tengo 59 años. Nací y vivo en Zaragoza. Casado, tengo dos hijos. Soy doctor en psiquiatría. Coordino el máster de Mindfulness y la cátedra de Ciencias Contemplativas de la universidad . Me preocupa la ecología y la falta de felicidad de Occidente. Soy budista y creo que hay algo más allá de la muerte
La noche en el día
El doctor García Campayo ha sabido mantener y unir aspectos de la psique humana que no hace mucho eran irreconciliables. Coordina el Grupo de Investigación en Salud Mental de Aragón, es psiquiatra del hospital Universitario Miguel Servet, pero también organiza el Congreso Internacional de Mindfulness, el más importante del tema en países de habla hispana, y ha publicado más de 250 trabajos de investigación y más de 50 sobre el tema del mindfulness (conciencia plena). Es meditador de toda la vida e investigador en ciencias contemplativas dentro de las cuales se estudian los sueños lúcidos en los que el soñador es consciente de que está soñando y puede influir en el contenido del sueño, lo que permite vivir la vida más intensamente, mejorar el estado de ánimo y resolver problemas. Publica Sueños lúcidos (Kairós).
En qué consisten los sueños lúcidos?
El individuo es consciente del hecho de que está soñando y puede influenciar conscientemente en el contenido del sueño.
¿Cómo distinguirlo?
Mientras dormimos pasamos por cinco o seis ciclos de 90 minutos. En la fase REM estamos completamente inmóviles, solo movemos los ojos y el diafragma para respirar, y es ahí cuando ocurren los sueño lúcidos.
¿Y todos podemos acceder a ellos?
El 50% de la población ha experimentado al menos un sueño lúcido en su vida y el 20% experimenta sueños lúcidos de forma regular, es decir, al menos uno al mes.
¿Y ahora se estudian desde la ciencia?
Sí, pero es algo que ha interesado a la humanidad desde hace siglos, los sueños lúcidos están en todas las tradiciones religiosas.
¿Cómo intervenir en ese sueño?
Entrenándote para ello.
¿Para qué, qué sentido tiene?
La experiencia de por sí ya te cambia la visión del mundo porque llegas al convencimiento de que hay algo más que el mundo físico. Pero tiene muchas más utilidades desde una perspectiva no mística: puedes desarrollar habilidades para ser más eficaz.
¿Útiles en el día a día?
Sí, muchos artistas como Wagner, James
Joyce, Brahms, Poe, Stevenson, o científicos como Mendeléyev y Mendel, se inspiraban o resolvían sus trabajos en el sueño.
¿Qué dice la ciencia?
El primer estudio en el que se confirma la existencia de sueños lúcidos se realizó en 1975 en Gran Bretaña, donde se intentó mantener comunicación entre el mundo despierto y el mundo dormido.
¿Consiguieron esa comunicación?
Sí, cuando el durmiente estaba en fase REM, los científicos le hacían preguntas y este respondía mediante el movimiento de los ojos con un lenguaje previamente pactado.
Increíble.
Este estudio, que se ha replicado muchas veces, ha demostrado que una persona puede escuchar y ser consciente sin salirse del sueño e ir contando lo que ocurre.
¿Adónde apunta ahora la investigación?
En averiguar cuáles son las técnicas más eficaces para tener sueños lúcidos.
¿Y cuáles son los beneficios?
Las personas que aprenden a tener sueños lúcidos duermen mejor, mejoran el estado de ánimo durante la vigilia, pueden resolver problemas interpersonales, acabar con fobias y otros trastornos como las pesadillas que afectan al 85% de la población.
¿Mejora el estado de ánimo, dice?
Cuando tenemos pesadillas, el impacto negativo de ese sueño suele permanecer en vigilia un tiempo. Del mismo modo, los sueños lúcidos que, en general, son una buena experiencia, producen un efecto muy agradable y positivo en la vigilia. No deberíamos desaprovechar ese potencial.
Enséñeme a soñar.
Es una técnica que requiere tiempo, pero para empezar lleve un diario del sueño. Escriba nada más despertarse lo que recuerde. El problema es que en la cultura occidental no consideramos importantes los sueños.
¿Y por eso no nos acordamos?
Efectivamente.Yo le recomiendo que en la vida real se pregunte de vez en cuando: “¿Esto es un sueño?”, como hacen tantas tradiciones. Si lo hace durante el día también lo hará en el sueño. Entonces debe hacer un chequeo de realidad: tire de su dedo, y si el dedo se estira es que está soñando.
¿Se pueden compartir sueños?
Es una experiencia descrita desde hace miles de años, era como el zoom de entonces: quedas a una hora, te encuentras en el sueño, conversas o visitas algo, y luego cada uno se acuerda de la conversación mantenida. Y eso es algo que se ha comprobado científicamente en laboratorios del sueño.
¿Qué nos dice esa capacidad?
La sensación de bienestar que se tiene con un sueño lúcido es equiparable a la de la meditación. El diálogo interno, estar pensando mientras hablamos con alguien que tiene un pelo en el jersey, es evitable.
¿La meditación detiene la rumiación?
Sí, con la práctica de la meditación ese diálogo interno desaparece y simplemente vivimos la realidad, porque los seres humanos no vivimos la realidad, la pensamos.
¿Qué debemos entender de todo esto?
La gran mayoría se olvida de los sueños porque piensan que la parte del mundo importante ocurre despiertos. No es cierto, un tercio de nuestra vida la estamos tirando a la basura en lugar de vivirla, disfrutar y aprender.
No veo yo que las culturas que atienden a los sueños vivan mejor que nosotros.
Nuestra sociedad, que es la más desarrollada tecnológicamente, es la de mayor sufrimiento. Cada nueva generación tiene más sufrimiento psicológico, más patología psiquiátrica, que las anteriores.
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