La sombra en nosotros
"Cada uno de nosotros proyecta una sombra tanto más oscura y compacta cuanto menos encarnada se halle en nuestra vida consciente. Esta sombra constituye, a todos los efectos, un impedimento inconsciente que malogra nuestras mejores intenciones".
"El encuentro con la sombra es el trabajo inicial del aprendiz en el desarrollo del individuo... Mientras que el trabajo con el ánima es "la obra maestra".
§ Carl jung. En sus lecturas de Eranos de 1934, (CW 9i § 61)
. . .
"Uno no se ilumina imaginándose figuras de luz, sino tornando la oscuridad consciente".
§ Carl Jung, "Obra completa de Carl Gustav Jung". Volumen 13.
. . .
"La figura de la sombra personifica todo lo que el sujeto no reconoce y lo que, sin embargo, una y otra vez le fuerza, directa o indirectamente, así por ejemplo, rasgos de carácter de valor inferior y demás tendencias irreconciliables".
§ Carl G. Jung, Bewusstsein, Unbewusstes und Individuation, Zentralblatt für Psychotherapie, 1939, pág. 265.
. . .
"La sombra es... aquella personalidad oculta, reprimida, casi siempre de valor inferior y culpable que extiende sus últimas ramificaciones hasta el reino de los presentimientos animales y abarca, así, todo el aspecto histórico del inconsciente... Si hasta el presente se era de la opinión de que la sombra humana es la fuente de todo mal, ahora se puede descubrir en una investigación más precisa que en el hombre inconsciente justamente la sombra no sólo consiste en tendencias moralmente desechables, sino que muestra también una serie de cualidades buenas, a saber, instintos normales, reacciones adecuadas, percepciones fieles a la realidad, impulsos creadores, etc.".
§ Carl G. Jung, Aion, 1951, pág. 379
. . .
La sombra se mostraría simbólicamente a través de representaciones tales como la serpiente, el dragón, los monstruos y demonios, entre otras muchas, y existiría tanto una sombra de carácter individual como una sombra colectiva.
Finalmente, y como consecuencia de lo expuesto, fundamentalmente derivado de la idea de la inclusión de los opuestos en la totalidad, Jung alude al Cristianismo como excepción irresuelta ante la problemática del mal:
(...) "La contraposición de lo luminoso y bueno, por un lado, y de lo oscuro y malo, por otro, quedó abandonada abiertamente a su conflicto en cuanto Cristo representa al bien sin más, y el opositor de Cristo, el Diablo, representa el mal. Esta oposición es propiamente el verdadero problema universal, que aún no ha sido resuelto".
§ Carl G. Jung. Psicología y Alquimia, 1944, 21, § 22.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario