ODIABA LOS GATOS HASTA QZE UN DÍA TOMÉ AYAHUASCA

ODIABA A LOS GATOS, HASTA QUE UN DIA TOMÉ AYAHUASCA
Desde pequeño he rechazado a los gatos, sobre todo porque me arañaban; un día mi hija de 5 años trajo un gato a mi casa, era pequeño y ella queria criarlo; se lo permití, pero el gato no dejaba de arañarme. Yo le trataba muy mal, lo rechazaba, lo despreciaba y quería regalarlo. Un día el gato se enfermo, aun era muy pequeño, estaba muy mal, entonces mi hija me dijo: "papa vamos a darle ayahuasca al gato, porque sino se va a morir" yo le dije: "ademas de darle ayahuasca al gato, voy a tomar yo tambien, porque creo que el gato está enfermo por mi rechazo" entonces tomamos ayahuasca el gato y yo, al gato mi hija le dio con la punta del dedo mojado en ayahuasca, y yo tome una cucharita pequeña. Despues de unos minutos de haber tomado ayahuasca, comenzó el proceso en el gato y en mí. El gatito se me acostó justo encima de mi corazón. alli se quedó más de 2 horas, enrollado, y pidiendome que lo acepte que lo quiera; comence a acariciarlo, a sentirlo, a mirarle a los ojos y a ver su preciosidad y su sabiduría. Poco a poco fui comprendiendo muchas cosas de los gatos y sobre todo de la parte de mi que le rechazaba.
En un momento me puse de rodillas y puse al gato en frente de mi, le pedí perdón por haberle maltratado y por haber pensado en regalarle, ademas le dije: "Te doy el permiso de arañarma hasta que me muera, no me voy a quejar más, me merezco eso pues he pensado en regalarte".
Desde esa noche, no solo que el gatito se curó, sino que yo tambien me sané de algo interno, y desde ese momento construimos una relacion maravillosa, cuando yo me levanto para escribir muy temprano en la mañana el gato me acompaña, se sube a mi cabeza y duerme alli, otras veces encima de mi hombro....
He podido ver porqué me molestaban los gatos, y me he enamorado de ellos.

Testimonio de Jose que nos ha enviado a nuestra redacción

Por ello hemos publicado una foto con un gato y ayahuasca.

Los seres humanos necesitamos entre tantas cosas, ser más sensibles a los animales y las plantas, a la naturaleza en general. la ayahuasca nos reconecta con lo natural, para aprender a respetarlo, amarlo y sentirlo como si fuesemos eso.